Las tuberías son un elemento esencial en cualquier instalación de fontanería. Por este motivo, a la hora de realizar un trabajo de este tipo, en el que necesitaremos tuberías, es importante elegir materiales de calidad, así como determinar que tipo se necesita para lograr un mejor trabajo y sobretodo, minimizar complicaciones en un futuro.
Desde Fontanería Marco, te contamos todo acerca de las tuberías de fontanería, elementos a partir de los cuales se fabrican y tipos según la necesidad del cliente y espacio.
Dentro del mundo de las tuberías existen muchos tipos, con características y propiedades concretas. A continuación, te los explicamos:
El uso de este material en este sector es cada vez mayor y más popular. Esto es gracias a sus propiedades, bajos costes, ahorro de tiempos y ventajas de manipulación.
Las tuberías de cloruro de polivinilo o PVC son empleadas frecuentemente para transportar agua a alta presión y se utiliza en desagües de aguas sucias, potables, fecales o pluviales. Este tipo de tuberías de fontanería están disponibles en diferentes diámetros y son de color blanco o gris.
Las tuberías de Policloruro de vinilo clorado es un derivado del PVC con una mayor cloración. Son tuberías de color amarillo y su principal ventaja es que soportan altas temperaturas pudiendo transportar agua fría y agua caliente. Además, es el sistema ideal para aplicaciones de agua de proceso industrial y necesitan poco o nulo mantenimiento.
Están diseñadas para instalaciones de aguas sanitarias y de calefacción. Su instalación es sencilla, económica y cómoda. Es un material fácil de tratar, ligero y tiene una vida útil de hasta 50 años de funcionamiento.
También conocidas como tuberías de polietileno reticulado, son utilizadas frecuentemente en calderas y sistemas de calentamiento mediante agua. Resisten distintos tipos de temperatura y por su facilidad de manejo e instalación.
Dentro de las tuberías metálicas encontramos diferentes materiales como acero galvanizado, inoxidable, de fundición y de cobre como las principales tuberías metálicas.
Este tipo de tuberías se encuentran tanto en locales comerciales como en viviendas. En instalaciones de fontanería podemos encontrarlas en los desagües, o agua para limpieza o jardinería. ¿Su desventaja? No son muy duraderas si se exponen a condiciones medioambientales, llegando a corroerse.
Es uno de los materiales más utilizados en el ámbito doméstico. ¿La razón? Este tipo de tuberías de fontanería no se oxidan y esto hace que duren mucho más tiempo.
Las tuberías de acero inoxidable suelen ser las más usadas en el mercado para instalaciones exteriores, debido a la prolijidad visual que ofrece el material. Además, este metal es muy usado en la fontanería gracias a su fluidez y durabilidad porque no suele estropearse con el paso del tiempo.
Son las más utilizadas para el transporte de agua y gas gracias a su resistencia. Ya que es un material que no se corroe y garantiza un perfecto funcionamiento.
A la hora de elegir una tubería de fontanería, debemos en tener en cuenta ciertos factores. Cada instalación puede necesitar un tipo u otro de tuberías, en función del uso que se les dé y son los conductos a través de los cuales se desplaza un determinado fluido de un lugar a otro. Una vez detectada la funcionalidad de la tubería, procedemos a elegir el tipo de material que se empleará y que ajuste a nuestra necesidad.
Es importante recordar que, toda tubería de fontanería, necesita un mantenimiento adecuado para que perdure en el tiempo.
Si estás buscando tuberías de fontanería o estás interesando en realizar algún mantenimiento, ponte en contacto con nosotros en el siguiente enlace.